En la era digital que se plantea en la postpandemia, las empresas necesitan habilitar nuevas formas de trabajar, atender a los clientes y hacer negocios. En este marco se destacan ciertas tendencias tecnológicas que serán especialmente influyentes, tal como se explica en una presentación que nos parece interesante sintetizar.
La primerade estas tendencias tecnológicas tiene que ver con el cambio a un mundo cada vez más digital, en un contexto en una parte mayor de la vida de las personas se trasladó al plano online. Este cambio tiene un costo, que es la fatiga digital. Y las organizaciones tendrán que encontrar la manera de diferenciarse en un mundo en línea cada vez más “congestionado”.
La segunda tendencia se vincula con la experiencia del trabajo remoto, en un marco en el que muchos trabajadores del conocimiento continúan trabajando desde casa. El cambio dramático en la forma en que se realiza el trabajo presentó enormes desafíos para los profesionales de TI. Y es probable que estos ajustes continúen a medida que las organizaciones acepten la realidad de que el trabajo remoto llegó para quedarse.
La tercera tendencia para 2022 se relaciona estrechamente con las anteriores ya que, para facilitar la transición a un mundo cada vez más digital y marcado por un porcentaje importante de trabajo híbrido y remoto, las empresas acelerarán la adopción de tecnologías nativas de la nube (cloud native), como contenedores e infraestructura sin servidor. La Nube nativa ofrece la capacidad de crear nuevas arquitecturas de aplicaciones que sean resistentes, elásticas y ágiles, lo que permite responder al rápido cambio digital. La consultora Forrester, de hecho, estima que para 2022 la mitad de las organizaciones empresariales adoptará la Nube nativa.
Hiperautomatización
Otra tendencia ligada con la necesidad de acelerar la colaboración es la hiperautomatización. “Muchos equipos de TI ya estaban adoptando la automatización como parte de su adopción de las metodologías DevOps antes de la pandemia. La hiperautomatización llevará esto al siguiente nivel, automatizando no solo los procesos de TI, sino también los comerciales. Incorporará inteligencia artificial (IA) y eliminará los procesos manuales siempre que sea posible”, se indica en el informe que estamos resumiendo.
Por otra parte, los analistas ven un papel cada vez mayor para la IA a medida que las herramientas relacionadas adquieran la capacidad de realizar un trabajo más creativo. Por ejemplo, una consultora internacional señala que la IA generativa tiene el potencial de “crear nuevas formas de contenido creativo, como videos, y acelerar los ciclos de I+D en campos que van desde la medicina hasta la creación de productos”.
En el campo de la analítica la IA continuará teniendo una gran influencia, ayudando a las compañías a tomar decisiones informadas. De hecho, se espera que surja la inteligencia de decisiones como enfoque práctico que “modela cada decisión como un conjunto de procesos, utilizando inteligencia y análisis para informar, aprender y refinar las decisiones”.
Por otra parte, dado que durante la pandemia se incrementaron los ciberataques, otra tendencia para el año que se inicia es el desarrollo de nuevas arquitecturas de confianza (como Zero Trust). Estas arquitecturas “brindan estructuras para verificar la confiabilidad de los dispositivos a medida que los datos fluyen a través de redes, API y aplicaciones».
Transformación digital
La necesidad de dotar al negocio de mayor agilidad (business agility) quedó de manifiesto con la pandemia. Por ello muchas organizaciones están adoptando nuevos enfoques para el desarrollo de software. En tal sentido una de las tendencias es la de las aplicaciones componibles: bajo este enfoque, las aplicaciones “se construyen a partir de muchas piezas independientes más pequeñas que se pueden usar en múltiples aplicaciones”. Este modelo facilita el uso y la reutilización del código, lo que acelera el tiempo de comercialización de nuevas soluciones y libera valor empresarial.
Por otro lado durante los años recientes los factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) pasaron a ocupar un primer plano, y se espera que TI también se vea afectada. Por ejemplo, una consultora estima que para 2026 el 60% de las empresas del G2000 utilizará los KPI y los datos de sostenibilidad como parámetros principales de control operativo, en comparación con menos del 20% en 2021.
Finalmente la décima tendencia tecnológica que se observa para 2022 tiene que ver con las inversiones gubernamentales de estímulo que buscan impulsar la economía en la postpandemia. En muchos casos estas inversiones giran en torno a la infraestructura inteligente, que combina IoT y tecnologías de vanguardia que utilizan redes avanzadas como 5G.
Para revisar estas tendencias tecnológicas más en detalle puedes ingresar aquí.