En un desarrollo de software a medida y nuevo se crea una aplicación desde cero. Por lo común se opta por este camino cuando no hay otro remedio que encarar la migración. En cambio en una modernización se actualizan algunos aspectos del software (funcionalidades, arquitectura, en muchos casos también algo del lenguaje y del framework, entre otras cuestiones) siempre y cuando pueda garantizarse la buena convivencia de la aplicación dentro del actual entorno de IT de la organización.
En la actualidad la modernización de aplicaciones responde a claras necesidades de las empresas, que deben actualizar su infraestructura de TI y sus soluciones informáticas para poder brindar experiencias excelentes a los clientes y avanzar con su transformación digital. Por algo, la consultora Markets&Markets estima que el tamaño del mercado de los servicios de modernización de aplicaciones crecerá de U$S 11 mil millonesen 2020 a casi U$$ 25 mil millones para 2025, creciendo a una tasa anual compuesta de prácticamente 17% durante el lapso pronosticado.
La modernización de aplicaciones se enfoca en aprovechar la eficiencia de las aplicaciones modernas sin perder de vista la familiaridad y la seguridad que ofrecían las aplicaciones heredadas. Conceptualmente es el proceso de actualizar programas de software antiguos para ejecutarlos en tecnología moderna. Generalmente implica reemplazar, readaptar o actualizar el stack tecnológico de la aplicación y la plataforma en la que se ejecutan; también puede involucrar mejoras en su arquitectura o el agregado de funciones de vanguardia. Es decir que la modernización supone actualizar el software antiguo para que la empresa pueda obtener un nuevo valor comercial o usos de él.
Desarrollo y modernización
¿Qué es lo que se actualiza al modernizar aplicaciones? Su infraestructura de plataforma, su arquitectura de TI interna y/o sus funciones. El proceso implica una readaptación, refactorización, un cambio de propósito o una consolidación de la programación con el objetivo de alinear la herramienta con las necesidades actuales del negocio.
Si bien por lo común estos proyectos se enfocan en sistemas heredados, modernizar aplicaciones no es solo para soluciones antiguas: también se puede tomar una aplicación empresarial construida hace relativamente poco tiempo y visualizarla a través de una lente más moderna y futurista.
Tecnología en la Nube
Cuando las empresas reconocen que continuar usando una aplicación empresarial heredada tal como está limitará su crecimiento, le impedirá ofrecer servicios de calidad, aletargará su proceso comercial opondrá en cuestión la seguridad de sus datos, es hora de hacer algo.
Desarrollar desde cero puede requerir tiempos largos y una adaptación al nuevo software, algo que no siempre se da con facilidad. Además, muchas organizaciones por ahí quieren utilizar nuevas tecnologías para mejorar sus flujos de trabajo, pero aún valoran algunos aspectos de su aplicación heredada. En ese caso, la modernización de la aplicación puede ser una buena opción.
Al actualizar el programa antiguo se logra hacerlo más rápido, más seguro y/o mejor adaptado a las necesidades actuales de los clientes. También se pueden modernizar aplicaciones heredadas para migrar a la nube, por caso (o sea llevar aplicaciones locales a la arquitectura del cloud computing). Esto último permitirá aprovechar los beneficios del nuevo entorno, que son varios: agilidad para lanzar nuevas funciones o servicios, escalabilidad, mayor velocidad de comercialización y menores costos.
Al facilitar las integraciones, el hecho de actualizar el software antiguo también puede ayudar a la empresa a aprovechar las nuevas tecnologías disruptivas, como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático o el big data.
Por otra parte, la modernización de aplicaciones también ayuda con la ciberseguridad. Al respecto, cabe destacar que las aplicaciones heredadas pueden hacer que las empresas sean vulnerables a las amenazas, ya que en muchos casos no son compatibles con los estándares de seguridad de alta calidad y los métodos de autenticación modernos.
Las aplicaciones son un activo digital de las empresas. Y al mantenerlas vigentes, la modernización las revalúa y las coloca en condiciones de acompañar las nuevas necesidades del negocio. Desde Baufest abordamos la modernización de aplicaciones heredadas como proyectos especiales y diferentes al desarrollo de software a medida. Trabajamos con una metodología específica y comprobada que nos permite garantizar la continuidad de la operación, la convivencia de los sistemas durante la transición y altos niveles de adopción.